Hola Luna.
Hoy me siento abrumada por la dulzura de tu presencia. Será quizás el hecho de que mi romanticismo ha muerto a manos de un amor que rompió mi alma y me desgarro el corazón. Será de pronto que tu luz, reflejada en aquella palida superficie me ilumina de forma suave, de forma leve. Me hace sentir dentro de un aura bohemia, con mi cigarrillo en la mano y con un vaso de vodka en el otro. Me sumergen en un mar de color queso, ni amarillo ni blanco, que me da ganas de amar, aunque ya no sepa como. Que me da ganas de saltar y de reír, aunque el vodka me pone pesadas las piernas y la mente. Me dan ganas de escribir para él, versos largos y sonantes, pero no lo haré, no lo haré luna porque lo único que me queda es mi amor por mi, y si lo amo a él desequilibro mi aura, mi esencia y mis prioridades.
Este es solo un blog nacido del ojo de un huracán, del momento más grande de intensidad de una tormenta.
lunes, 10 de noviembre de 2014
Luna
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario