Nos han engañado desde pequeñas. Nos han prometido el amor ideal, el príncipe azul, el chico caballeroso, el hombre perfecto. Pero no es así, jamás es así. Ojalá fuera así. Pero no, porque los chicos más lindos son gays. Porque los más dulces, ya están tomados, porque chica, si encuentras uno, ya no lo sueltas. Y porque los patanes y guaches andan sueltos, diciendo piropitos vulgares y hablando mil cosas sin sentido. Era mucho pedir un chico dulce, tierno, caballeroso, medianamente lindo y con neuronas funcionables? Me niego a aceptar menos de lo que he deseado toda mi vida. No pido una mezcla entre Justin Bieber, DiCaprio, Einstein y el príncipe Felipe, no. Solo quiero el hombre que me merezco. Y no me conformo con nada menos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario